En octubre ha vuelto la normalidad a los ríos cántabros que, gracias a Red Cambera, acogen a los vigilantes fluviales por todo su territorio ribereño.
Las cuencas de los ríos cántabros reciben no solo la reconstituyente lluvia del otoño sino la mirada de unos vigilantes de excepción. Más de 500 personas, agrupadas entre amigos o con la familia, estudiantes o personas afines al medio ambiente, siguiendo las medidas de seguridad sanitarias vigentes, constituyen el voluntariado que se organiza en grupos creados por ellos mismos. Todas las personas son bienvenidas cuando el impulso es empeño por mejorar el tramo de río elegido.
Así, descubren como con su implicación activa hacen ciencia ciudadana disfrutando de una experiencia que contribuye a la mejora del bien común como es el agua de nuestros ríos y los seres vivos que los habitan.
Desde 2008, gracias a la iniciativa desarrollada por la Red Cambera con el apoyo del CIMA del Gobierno de Cantabria, se desarrolla el Proyecto Ríos, una iniciativa de voluntariado ambiental que se suma a la red ibérica de vigilancia del estado natural de los ríos, impulsada a nivel estatal por la Associació Hàbitats.
Retrato de un río
Los vigilantes se despliegan durante todo el mes por las orillas de los ríos Asón, Agüera, Ebro, Camesa, Miera, Campiazo, Pas, Pisueña, Saja, Besaya y cursos fluviales de la Costa Oeste. No se trata solo de amantes del aire libre y los paseos en la naturaleza sino de personas convencidas de que con sus actitudes ambientales pueden mejorar el entorno natural de su comunidad.
Atentos a la turbidez del agua, si hay cantos rodados en el curso fluvial, al ave que se esconde entre el follaje, a los vertidos que asoman en sus márgenes, los invertebrados a la vista y las huellas de animales más esquivos y exclusivos de ríos con buen estado de salud como la nutria o el visón europeo. Como auténticos detectives no dejarán escapar ningún indicio que ayude a diagnosticar el estado de salud fluvial.
“Invitamos a la ciudadanía a pasar a la acción porque su participación resulta imprescindible para cuidar nuestros ríos y riberas, implicándonos en su estudio, mejora y conservación” afirma Nacho Cloux, que junto con Ana Gracia, coordinan el proyecto Ríos desarrollado en Cantabria por Red Cambera.
En esta campaña de voluntariado otoñal, que se lleva a cabo durante el mes de octubre, los numerosos vigilantes –91 grupos que reúnen un total de 688 observadores-, gracias al éxito de participación por el llamamiento promovido desde Red Cambera, el río va a sonar más cercano en los 36 municipios porque los vigilantes estrenarán una aplicación de teléfono móvil cuando recorran los 500 metros del río elegido.
Gracias a RiosconCienciApp la recogida de datos resultará más ágil y divertida. La sencillez en su recopilación hace que la tarea más tediosa de las salidas de campo se resuelva rápida gracias a una amena herramienta digital. Su utilización hará que las observaciones sobre el terreno queden automáticamente registradas en los dispositivos móviles de cada grupo participante.
Con los datos recopilados se ha creado, en colaboración con la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología del Ministerio de Ciencia e Innovación (FECYT), una base de datos localizada en los ríos del Estado español y un visor GeoWeb que facilita la visualización de toda la información recopilada.
A través del voluntariado ambiental del Proyecto Ríos, 45 kilómetros de cauces y orillas fluviales serán supervisadas para velar por su buen estado ambiental.
El Proyecto Ríos es un programa de participación ciudadana para el diagnóstico y conservación de los ríos. Se fundamenta sobre tres pilares básicos de acción como son la educación ambiental, la ciencia ciudadana y el voluntariado ambiental.
El Proyecto Ríos está dirigido a cualquier colectivo o persona que quiera participar voluntariamente, ya sean centros educativos, asociaciones vecinales o con intereses en el medio natural, familias, grupos de amigos, o ciudadanos y ciudadanas de manera individual. El objetivo central del proyecto es unir personas y ríos para la conservación participativa de los ríos de Cantabria. El vínculo entre la población y el medio natural se consigue a través de una formación práctica que busca que sean las personas voluntarias las que conozcan, estudien y diagnostiquen el patrimonio natural, lo sientan como propio y, finalmente, adopten responsabilidades hacia el mismo.
Jornadas de limpieza, planificación de acciones de mejora fluvial, charlas de educación ambiental, adopción de un tramo de río en colaboración con entidades y organismos públicos o propietarios privados son algunas de las interesantes actividades ambientales que han surgido en colaboración con Red Cambera gracias a la enorme implicación de los voluntarios ambientales.
El Proyecto Ríos en otras comunidades autónomas está vinculado a entidades como ADEGA (Galicia), la Fundación Limne (Demarcación Hidrográfica del Júcar), Territorios Vivos (Madrid) y ASPEA (Portugal), y que en conjunto conforman la Red Ibérica de Proyecto Ríos.
En Cantabria el Proyecto Ríos se desarrolla continuadamente desde el año 2008 y cuenta con el apoyo del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA) del Gobierno de Cantabria.