Observación de septiembre: correlimos semipalmeado

Acabando el verano y dando paso al otoño, miles de aves limícolas recalan en los fangos cántabros. Unas simplemente están de paso hacia sus cuarteles de invierno y paran para reponerse de sus largos viajes. Otras, sin embargo, se quedarán a invernar hasta que comience la migración prenupcial. El penúltimo fin de semana de septiembre, la Asociación Cambera colaboró en el entorno del estuario del Asón en el VII Festival de la Migración de las Aves, donde se acerca a la gente al disfrute de las mismas. Uno de los participantes, el conocido ornitólogo gallego Antonio Sandoval Rey, localizó el viernes 20 de septiembre frente al observatorio de La Arenilla (Santoña)  un ejemplar de correlimos semipalmeado (calidris pusilla) asociado a un bando mixto.
En los dos días siguientes, muchos aficionados pudimos disfrutar de este ejemplar. En pleamar, el bando de correlimos se posaba en una isla o en otra, dejándose ver en ocasiones, y haciéndolo imposible en otras. Fueron observaciones no demasiado cercanas, pero sí lo suficiente para poder confirmar la rara observación.
El correlimos semipalmeado es un limícola pequeño de pico corto y grueso, que se caracteriza por una palmeadura parcial entre sus dedos. Cría en las costas del norte de América, e inverna en las del centro y sur del mismo continente. Su presencia en las costas del occidente europeo es rara, y ello ha provocado un gran revuelo entre los ornitólogos.